Análisis de Responsabilidad Civil Contractual en Caso de Lesión Neurológica Post-Quirúrgica: Un Enfoque Jurídico
Carlos Eduardo Paniagua Fuentes
En el ejercicio de la medicina, la búsqueda de la salud del paciente es primordial, pero ¿qué ocurre cuando un procedimiento quirúrgico resulta en complicaciones inesperadas? Este artículo, desde una perspectiva jurídica, analiza un caso de responsabilidad civil contractual derivado de una lesión neurológica sufrida durante una cirugía, explorando los hechos, la actuación de las partes y las consideraciones legales pertinentes.
Descripción de Hechos
El caso involucra al señor Jose, quien sufrió una lesión del nervio radial durante una cirugía de reducción abierta de fractura de húmero en el Hospital. Jose había sido víctima de un atentado con arma de fuego, resultando en fracturas en su brazo izquierdo, por lo cual fue necesaria la intervención quirúrgica.
- El paciente es intervenido quirúrgicamente para corrección de fractura.
- Durante la cirugía se presenta una lesión en el nervio radial, resultando en una «mano caída».
- Jose demanda al Dr. Hamillton y al Hospital., buscando una indemnización por daños patrimoniales y extra patrimoniales.
- El Hospital. se opone a la demanda, argumentando «inexistencia de culpa o mala praxis médica», entre otras excepciones.
- El Dr. Hamillton también se defiende, alegando «inexistencia de culpa médica y correcto ejercicio de la lex artis ad hoc».
Análisis Jurídico de la Actuación de las Partes
En este tipo de casos, es fundamental analizar la responsabilidad médica, la cual, en general, se considera una obligación de medios, no de resultados. Esto significa que el médico se compromete a actuar con diligencia y cuidado, utilizando sus conocimientos y habilidades para el beneficio del paciente, pero no garantiza la curación.
- Demandante (Jose): Debe probar la culpa del médico y/o del hospital, demostrando que hubo negligencia, impericia o falta de cuidado en la atención médica. También debe probar el nexo causal entre la acción u omisión de los demandados y el daño sufrido.
- Demandados (Dr. Hamillton y Hospital.): Pueden defenderse demostrando que actuaron con la debida diligencia y cuidado, siguiendo los protocolos médicos y la lex artis. También pueden argumentar que la lesión fue el resultado de un riesgo inherente al procedimiento quirúrgico.
Contextualización Jurídica del Caso
La sentencia de primera instancia denegó las pretensiones del demandante, al no probarse el nexo causal y el hecho culposo. El juez consideró que, si bien existió la lesión, no se demostró que esta fuera resultado de una mala praxis por parte del médico. Además, se tuvo en cuenta que el paciente había firmado un consentimiento informado, asumiendo los riesgos del procedimiento.
La parte demandante apeló la decisión, argumentando errores en la valoración de las pruebas y la omisión de considerar la falta de control postquirúrgico. Sin embargo, el Tribunal Superior confirmó la sentencia de primera instancia, señalando que no se logró acreditar la culpa de los demandados ni el nexo causal.
Análisis Jurídico del Caso
El caso plantea importantes cuestiones sobre la responsabilidad médica y los límites de la obligación de los profesionales de la salud. Si bien es cierto que los médicos deben actuar con diligencia y cuidado, no se les puede exigir garantizar resultados, especialmente en procedimientos complejos que conllevan riesgos inherentes.
En este caso, la evidencia sugiere que la lesión del nervio radial pudo ser una complicación conocida de la cirugía, y no necesariamente el resultado de una negligencia médica. Los dictámenes periciales indicaron que la lesión del nervio radial es una complicación frecuente en el procedimiento de osteosíntesis del húmero y constituye un riesgo inherente a este tipo de intervención quirúrgica. Además, se consideraron los antecedentes médicos del demandante, como las lesiones previas y la pseudoartrosis, que aumentaban el riesgo de complicaciones.
Este caso subraya la importancia de una comunicación clara y completa entre el médico y el paciente. El consentimiento informado no es solo un requisito legal, sino una herramienta fundamental para que el paciente comprenda los riesgos y beneficios de un procedimiento, y tome una decisión informada.
Además, es crucial que los profesionales de la salud mantengan altos estándares de diligencia y cuidado en su práctica, y que los hospitales cuenten con protocolos adecuados para garantizar la seguridad del paciente. Sin embargo, también es importante reconocer que la medicina no es una ciencia exacta, y que las complicaciones pueden ocurrir incluso cuando se toman todas las precauciones necesarias.